En uno de los desayunos tecnológicos del mes de octubre conocí a Alberto García-Lluis Valencia. Antes de que pudiera hacerle algunas preguntas sobre la tecnología BlockChain, que era para lo que habíamos quedado, me hizo entrega de un libro titulado "La transformación digital del talento". El título junto al hecho de ser él el autor del mismo me dejaba pocas opciones y tendría que leerlo.
Fácil de leer si eres un apasionado de la tecnología y de los cambios que van a producirse en los próximos años. Con una extensa bibliografía al respecto y relacionando muchos de los informes que instituciones de prestigio han ido publicando con apreciaciones propias sobre la forma en la que las tecnologías emergentes transformarán la educación, nuestra forma de trabajar o la valoración de las empresas. Una de las referencias que más llamó mi atención fueron las 14 nuevas competencias que plantea Thomas Frey para la próxima década. Competencias que hemos de cultivar para ser protagonistas en la era digital.
1.- Transformadores. Toda nueva conquista necesita de paladines que abran camino, que avancen y conquisten nuevos territorios. Expedicionarios que imaginan más allá de las fronteras de lo posible, que se equivocan y que vuelven a intentarlo con distintos enfoques.
2.- Expansionistas. La capacidad de adaptación será clave en un entorno cambiante. El pez grande ya no tiene las mismas ventajas competitivas que antes. Ahora la rapidez y la capacidad de adaptación ante nuevos retos marcarán la diferencia.
3.- Maximizadores. La tecnología por sí sola no puede dar respuesta a todos los retos que plantea la cuarta revolución industrial. Son necesarias personas capaces de sacar el máximo partido a procesos, situaciones y oportunidades. Hay quien es capaz de ver oportunidades donde otros sólo ven un problema que les impide seguir avanzando.
4.- Optimizadores. Lo más eficiente es lo óptimo. Recordemos continuamente el principio de Pareto según el cual el 20% de las acciones generan el 80% de los resultados. Este principio nos impulsa a centrarnos en ese 20% de las acciones más importantes, optimizando nuestro trabajo. Conseguir encontrar esas variables que producen los mejores resultados será imprescindible en esta nueva era.
5.- Inflexionistas. No estamos ante una época de cambios, sino ante un cambio de época. En este entorno cambiante es fundamental encontrar esos puntos de inflexión en los que se producen cambios significativos. No sólo es importante saber localizar estos puntos de cambio en tendencias de negocio, en tecnologías habilitadoras o en protocolos mejorados. Será fundamental conseguir localizarlos antes que los demás.
6.- Desmanteladores. El cambio al que nos enfrentamos va a suponer modificaciones en el estilo de vida de muchas personas. Algunos empleos dejarán de ser necesarios, se crearán otros nuevos y se especializarán otros muchos. En este contexto se hace imprescindible contar con personas capaces de cerrar antiguos caminos. Deben hacer posible el decrecimiento de las viejas industrias sin causar estragos en la sociedad, minimizando el impacto socioeconómico que pudiera generar la introducción de tecnología en procesos productivos.
7.- Creadores de circuitos cerrados de feedback. No todos los profesionales son capaces de analizar la opinión de los contactos cercanos sobre la propia entidad. Es necesario conseguir utilizar esas percepciones en favor del crecimiento ordenado y sostenible del proyecto.
8.- Contraatacantes. No faltarán los que muchos economistas liberales han bautizado a lo largo de la historia como tecnófobos. En la primera revolución industrial hubo quien quemó máquinas del telar mecánico, en la época del ferrocarril no faltó quien ligó su expansión con el desarrollo de nuevas enfermedades y en nuestra era no faltará quien culpe a las tecnologías emergentes de cosas horribles. La digitalización necesita de auténticos profesionales capaces de hacer frente a esas críticas que llegarán por parte de los detractores de las tecnologías emergentes. Los conocidos como "Technology Evangelists" son una buena muestra de lo que digo.
9.- Corredores de la última milla. Qué fácil es colocar primeras piedras pero qué difícil resulta en ocasiones poner últimas piedras. Hay tecnologías que sus desarrolladores concibieron como algo disruptivo y capaz de revolucionar un determinado sector, pero fallaron cuando había que llevarlas al usuario final. La tecnología alcanza un punto en el que las ganancias decrecen cuando se intenta alcanzar al usuario final. Este "gap" existente entre el mercado y el desarrollador. Competencia fundamental para crear valor.
10.- Contextualistas. El contexto es fundamental para entender el potencial de una determinada tecnología. Las competencias técnicas son importantes, pero conseguir colocar cada una de ellas en el contexto adecuado es un aspecto clave para alcanzar el éxito.
11.- Éticos. No añado ni una coma a lo expresado por Alberto García-Lluis en su libro. "Las nuevas tecnologías generarán nuevas y cada vez más complejas preguntas, y alguien tendrá que responderlas". Un aspecto importantísimo.
12.- Filósofos. El relato de aquellas empresas, entidades o proyectos que consigan colocarse a la cabeza serán las que triunfen. Sólo aquellos capaces de desarrollar una visión del mundo propia y consigan imponerla al resto serán capaces de dominar la nueva era.
13.- Teóricos. Toda práctica tiene un método. Todo método tiene una teoría detrás. Primero necesitamos la teoría y posteriormente vendrá el producto.
14.- Legacistas. Por último, hacer referencia a los legacistas tiene sentido en el contexto tecnológico en el que avanzamos. No podemos pensar sólo en mejorar, aumentar la productividad de los procesos y en crecer sin límite. Alguien debe pensar y preocuparse por las generaciones que nos sucederán. Suelo decir que no debemos preocuparnos tanto en dejar un mundo mejor a nuestros hijos, sino en dejar mejores hijos al mundo. Intentemos tener un poco de legacistas cada uno de nosotros.